Hackers aprovechan el descuido de los usuarios o la falta de protección entregada por las organizaciones para cometer delitos informáticos y robar información sensible.

Al 53% de los chilenos no le importa manejar asuntos relacionados con el trabajo en su tiempo libre y 29% sostiene que gestiona temas de la oficina durante las vacaciones porque le gusta mantenerse involucrado.

Al fin llegaron las esperadas vacaciones de invierno, momento en que muchos trabajadores aprovechan de tomar un descanso, acompañar a sus hijos (si es que los tienen) durante este período o simplemente recargar energías para enfrentar el segundo semestre del año. Pero no todo es diversión. En muchos casos los trabajadores no pueden o no quieren desconectarse totalmente de sus labores por lo que llevan un poco de trabajo al hogar o a donde quiera que vayan. De hecho, un estudio de la consultora Randstand señaló que el 43% de los chilenos piensa que su empleador espera que esté disponible por teléfono y correo electrónico durante las vacaciones.

[También te puede interesar: Trabajador Digital: 49% de los chilenos dejaría su trabajo actual para trabajar de forma remota]

Sea cual sea la decisión, no hay duda de que el nivel tecnológico y la penetración a internet que ha alcanzado el país permiten que los usuarios estén siempre conectados y sea un poco más difícil desvincularse de la oficina. De hecho, el 76% de la población chilena se declara usuaria permanente de internet, según la Séptima Encuesta Nacional de Acceso y Usos e Internet realizada por la SUBTEL. Esta cifra pone al país por sobre el promedio de América Latina, aunque aún por muy debajo de Europa.

Lo cierto es que, cada vez son más las empresas que permiten el teletrabajo –y no sólo en época de vacaciones- lo cual puede generar graves problemas si es que no se toman las medidas de resguardo necesarias. Y es que los hackers aprovechan el descuido de los usuarios o la falta de protección entregada por las empresas para cometer delitos informáticos y robar información sensible. De hecho, las cifras muestran que más de un 30% de la pérdida de información ocurre por tener equipos no protegidos. “Es lógico. Un entorno doméstico puede llegar a ser mucho más riesgoso que uno corporativo, ya que no se cuentan con las medidas de protección necesarias en comparación a las que una empresa si maneja”, señala Hans Erpel, gerente comercial de la multinacional NovaRed.

Peor aún, cuando las empresas no entregan un equipo asignado a sus trabajadores asegurando las medidas de resguardo, y en cambio, los trabajadores utilizan sus propios aparatos que no siempre cuentan con sus actualizaciones tanto a nivel de sistema operativo, aplicativos y antivirus.  Las cifras muestran que existe más de un 50% de riesgo asociado al mal uso de información empresarial alojada en equipos personales.

A pesar de que existen diferentes riesgos, algunos realmente básicos como lo son el robo de una contraseña, un fallo en el equipo o inclusive la pérdida o robo de este, que pueden hacer que el ladrón termine en su poder con información empresarial confidencial, el teletrabajo no tiene que ser necesariamente sinónimo de peligro.

“Las empresas pueden estar tranquilas al permitir que sus empleados lleven trabajo a la casa siempre cuando establezcan protocolos previos de cómo actuar en ciertos casos y entregando las herramientas de tecnologías necesarias para la protección de los notebooks, smartphones, etc., dependiendo sea el caso”, agrega el experto

Desde NovaRed, entregan algunos tips para que usuarios y empresas puedan protegerse:

  • Instalar softwares de seguridad tales como antivirus, antispam y antimalwares, y mantenerlos constantemente actualizados en todos los dispositivos.
  • Habilitar WiFi, Bluetooh o GPS solo cuando sea necesario (no mantenerlo activo todo el tiempo) para evitar el ingreso de virus.
  • Descargar aplicaciones sólo a través de tiendas oficiales, siempre leyendo los permisos que se solicitan antes de la instalación.
  • Realizar periódicamente una copia de seguridad de los archivos y toda la información contenida.
  • Cifrar la información del disco duro para que solo se pueda acceder con claves.
  • Limpiar los ficheros temporales, logs, cookies y el recordatorio de claves secretas.
  • Activar la gestión y localización remota, de manera que si el aparato se pierde o es robado, se pueda tratar de localizar y recuperar. En caso de robo, esta opción permite borrar toda su información y/o dejar inutilizado el aparato.
  • Utilizar contraseñas seguras y fiables, no repetirlas y cambiarlas cada cierto tiempo.
  • Usar escritorios remotos que permitan al trabajador conectarse directamente con el servidor de la empresa.
  • Evitar conectarse a redes de WiFi públicas que sean inseguras y no tengan claves de acceso.